Paseo entre la multitud

El día se presentaba fresco, el sol relucía allá donde fuese. Me había levantado algo incómoda pero enseguida tomé energías, me vestí y decidí salir a dar un paseo por la zona comercial del barrio. Había oído que era bastante entretenida y quería curiosear las tiendas. Llevaba un calzado bastante cómodo por lo tanto podía pasarme horas recorriendo las calles sin cansarme. Cogí el autobús que me llevase a una parada cercana a esta zona.

Transcurrieron minutos cuando me di cuenta que el autobús paró en una calle bastante grande llena de tiendas y de gente, así que bajé y miré a mi alrededor. La gente llevaba bolsas, bastantes en mi opinión, otras solo paseaban en grupos hablando y riendo. Dejé soltar un ligero suspiro y pronto me puse a mirar los escaparates de las tiendas. Habían locales de todo tipo: frutería, restaurantes, moda, calzado, joyerías, librerías... Con mirar ya dos o tres escaparates me mareaba de ver tantas cosas en un solo sitio.

Me resigné un poco, sonreí y avancé la calle, chocaba con la gran multitud de gente que iba y venía sin tan siquiera disculparse. Minutos más tardes, tras avanzar la calle encontré una heladería y al verla mi estomago rugió. -¡Vaya! Parece ser que mi estomago me domina.- sin pensármelo dos veces me acerqué al heladero y pedí un helado de turrón, me lo sirvió y salí de la heladería cuando de pronto alguien chocó conmigo...

Iba caminando por las calles comerciales del barrio. Me encontraba allí porque necesitaba un disfraz para mi nuevo espectáculo, que haría en poco tiempo. De paso aproveché para mirar algunas tiendas, puesto que, seguro, encontraría algo interesante. Encontré locales de todo tipo; droguería, frutería, supermercado, moda, jugueterías, bares, restaurantes, etc...

Me cansé de mirar los escaparates y, después de comprar mi disfraz, el cual llevaba en una bolsa, encontré una heladería. Sonreí como un niño, puesto que tenía muchas ganas de un helado. Fui a paso rápido a la heladería y, antes de entrar, choqué con una mujer que estaba saliendo. Esbocé un gesto de sorpresa.

-Lo siento, no te he visto... ¿Puedo recompensarte de alguna forma?

Me encontraba esquivando entre las multitudes de Lordly City, estaba un poco nervioso, pues me dirigía a una tienda a mitad de la calle, para recoger mi traje de boda, me dieron la fecha para hoy, tenian que ajustarmelo a medida y demás.

Cuando llegué a la tienda, mire alrededor, no estaba demasiado llena, y las pocas personas que había estaban mirando trajes, por lo que me atendieron enseguida

Kira Wright: Buenas, soy Kira Wright, venía por mi traje.

Recepcionista: Si, espere un momento.

El recepcionista tecleó unas cosas en el ordenador que alli había, y se marchó un momento. Al volver, traia mi traje dentro de una bolsa con el diseño de la tienda. Cogí mi traje y me despedí, pues ya pague de antemano la primera vez que vine. Una vez fuera de la tienda, decidí dar un paseo y ver los escaparates y demás, para entretenerme un poco.

Al chocar cerré los ojos del pequeño impacto, en el acto mi helado cayó al suelo a una velocidad que ni yo esperaba: -¡Vaya suerte la mía!- dije en un tono algo repentino. Desvié mi mirada hacia una voz masculina frente de mi, observé a un joven de una altura algo más alta que yo, para mi desgracia, su cabello era castaño y ojos del mismo color. Su cara parecía de culpabilidad, un poco, y se ofreció a recompensarme por el choque del momento. Miré al suelo algo triste por mi helado en el suelo y entonces con una cara algo extrañada y triste a la vez solo pude pedir una cosa: -La verdad, si no es mucha molestia... me gustaría otro helado.- en este momento me sentía algo aprovechada de un joven pero tenía tanta hambre que solo pensaba en el helado de turrón.

El joven entró en la heladería y le observé atentamente. De pronto el móvil que llevaba guardado en mi bolso sonó, me extrañé y lo miré. ¡Era la alarma! Sí, llegaba tarde a recoger un encargo en una tintorería. -Mierda, mi uniforme.- salí corriendo de la heladería y corrí lo más rápido posible a la tintorería a buscar mi uniforme del trabajo pero parecía ser que mi destino hoy era tropezarme con la gente y nuevamente choqué con otra persona y esta vez cayendo al suelo...

Entré a la heladería contento de haber conocido a una nueva persona y pedí dos helados, uno para ella y otro para mí. En ese momento vi a la chica huir de la heladería y esbocé una sonrisa triunfal; ¡Dos helados para mí!.

Salí de la heladería cuando vi que la extraña chica volvió a chocarse con un extraño y esta vez cayendo al suelo. La miré, divertido, pensando si entregarle el helado o no. En vez de eso, me quedé en el sitio y observé la situación atento, para ver como se iba desenvolviendo. Comencé a comer de mi helado mientras sostenía el de la chica con la otra mano.

-Si no lo quiere me lo quedo yo, mira que fácil.

Estaba mirando los geniales escaparate mientras bajaba la calle, iba algo despistado, ya que muchas cosas me encantaban y no prestaba demasiada atencion de por dondoe pisaba. De repente, mientras miraba otro escaparate, alguien chocó conmigo bastante fuerte, y ambos caimos al suelo, por suerte mi traje seguia en la bolsa. Alza la cabeza y vi a la chica en el suelo, enseguida me levante y ofrecimi mano para ayudarla a levantarse.

Kira Wright: Ah, esto... ¿Estas bien?

Me senté en la terraza de una sencilla y a la vez elegante cafetería en frente de un parque, rodeado de multitud de comercios, entre ellos, jugueterías, heladerías, tiendas de ropa... De repente, un camarero, con una cordial sonrisa, se me acercó y, con una leve inclinación sin dejar de sonreír, me preguntó con un suave tono de voz que es lo que quería tomar, a lo cual, respondiendo su a su sonrisa con otra, respondí: -Un chocolate caliente, por favor.- Acto seguido, el joven camarero se irguió y sin dejar de sonreír, asintió y se fue hacia el interior de la cafetería a preparar mi chocolate.
Unos minutos más tarde, el camarero, el cual parecía que no había borrado su sonrisa todavía, cosa que me extrañó, me trajo mi chocolate caliente. Pasaron alrededor de unos veinte minutos, que fue lo que tardé en tomar mi chocolate.
Tras pagar el precio correspondiente al chocolate, me levanté y decidí caminar un rato por el parque que antes había visto. Una vez allí, me senté en uno de los bancos que había en frente de una fuente, y desde allí, huvo una pequeña escena que me llamó la atención. No lograba distinguir a las personas debido a que me encontraba lejos de allí, sin embargo, lo que llamó mi atención fue la escena, ya que al parecer una joven había tropezado y alguien la estaba ayudando, cosa que no acostumbraba a verse por aquella calle.

Abrí los ojos tras la caída mientras me llevaba la mano a la cabeza, de pronto los abrí como platos observando al chico que estaba en frente de mi. -¿Eh? ¿Qué?- me extrañé un poco y en un momento escuché el ofrecimiento del chico para ayudarme, pero hice un gesto de negación con la cabeza y me levanté del suelo. -No te preocupes, ya puedo sola.- sonreí e hice un gesto de inclinación como pequeña disculpa por si hice algo molesto y seguí corriendo hasta llegar a la tintorería.

Por suerte llegué a tiempo antes de que cerrara, cogí mi uniforme y volví a pasear por las calles bien contenta. En mi interior no dejaba de pensar que algo me faltaba en todo el día, pero olvidé por completo el qué. Caminando llegué al lugar donde tuve mi segundo choque: El Parque. Vi un banco vacío y decidí sentarme a descansar un rato.

La chica me miro y se levantó sola, se disculpó y salió corriendo calle arriba, y me quedé un rato mirando como se marchaba, desde luego iba muy rápido, no me extraña que se chocase asi conmigo. Me sacudí un poco el pantalón, que se manchó ligeramente por atrás, y decidí marcharme al parque de al lado y relajarme, no queria mas golpes hoy. Al llegar al parque, para mi sorpresa, me encontré con Paula, sentada en un banco tomandose algo*

Kira Wright: Paulaaa! ^^ ¿Qué haces aquí? owo *Me siento al lado en el banco, dejando apoyada la bolsa en otro hueco que quedaba en el banco* Asdf chocolate caliente, yo tambien quiero *O*

Continué observando la escena, y vi que la joven, con paso apurado, se fue de nuevo por las calles. Con esa velocidad, no me extrañaba la posibilidad de que pudiese tropezar de nuevo. Con las manos posadas en el vaso de plástico en el cual estaba mi chocolate, lo miro fijamente, sin advertir que alguien se había sentado a mi lado. Reconozco la voz de Kira y al instante giro mi cabeza para mirarle, sonriéndo y me acerqué a el*

Paula Vi Britannia: Pues no sé, me apetecía pasear, no más~ :3 *Sonrío al ver que quiere chocolate, y llevo mi vaso hacia él* ¿Quieres? :3

Magnifi observó como esa extraña chica a la que le había comprado un helado se alejaba corriendo. Se acercó al chico y a la chica que estaban juntos hablando, con timidez, puesto que se les veía una gran complicidad y se sentía un poco fuera de lugar. Esbozó una sonrisa y les tendió la mano a ambos, con un helado en cada mano, los cuales se empezaban a derretir poco a poco.

Magnifi Grey: Emm... Hola c: ¿Habéis visto a donde se dirigía esa chica que ha salido corriendo? Es que necesito entregarle algo que le pertenece y me ha dejado a mí con toda la cara.

Las sospechas de Magnifi se reafirmaron; esos dos se conocían y tenían demasiado feeleng, se sentía un poco apartado al lado de la complicidad de ambos.

Un chico se acercó a nosotros, preguntando por una chica, según parece la misma con la que me golpeé, por lo que dice, tenia dos helados en la mano, pensé que uno seria de esa chica, y supuse que eran pareja.

Kira Wright: Oh, iba con un monton de prisas calle arriba, como si llegase tarde o algo, nos dimos un buen topetazo Hahah Vaya pena de helado, esta medio derretido ya D:

De repente, vi pasar por la calle a la chica de nuevo, ya andando mas tranquila, llevando algo en una bolsa, calle abajo de nuevo, y me levante.

Kira Wright: Oh, mira ahí esta tu novia!! :O *señala hacia ella* Creo que se dió cuenta :O *gritando* Oyeeeeee! Aquiiiii veeen que esta tu novioooo!!! owo *observo como se gira y mira hacia aqui con cara confusa* Creo que se dió cuenta! :_D

De repente, un joven con aspecto de mago se acerca a nosotros preguntando por una chica que iba con muchas prisas. Seguramente, era la chica a la que tan apurada había visto antes. Aún con las manos en mi chocolate, el cual sentía que poco a poco se iba enfriando, observé como al parecer Kira era quien había tropezado con esa chica, y no solo él, sino que al parecer, ese joven mago también había pasado por lo mismo. Observé detenidamente uno de los helados que tenía en sus manos, pues estaba derritiendose. Tras ver que Kira y él comenzaban a hablar, al poco rato, observo como efectivamente parece que la chica, por alguna razón, se dio por aludida ante la llamada de Kira.

Paula Vi Britannia: Es cierto, ha mirado y todo :3